ratón pirulero

Para la excitación no hay nada mejor que un beso de esos bien dados, que te sacan el aliento, y hasta te dejan sin saliva. Una caricia en la espalda, bien suave, tan suave que te eriza toda la piel. Besos en la parte baja del vientre, y una de las mejores cosas desde mi experiencia: besos en el cuello, cerca de las orejas, pueden dejarme entre esa línea que separa el consciente del subconsciente. Pero es cierto que la excitación no es un proceso meramente físico, también se dice que uno de los lugares erógenos por excelencia es el cerebro. Después de todo las fantasías nacen ahí y viven a diario ahí, hasta cumplirlas por supuesto. Después de haberme aburrido de miles de blogs de mujeres quejandose sobre lo malo que son todos los hombres del universo, navegando por otros blogs, descubro que otras mujeres los usan a modo de diario íntimo, diarios íntimos con historias sensuales, experiencias propias y/o fantasías (también hay un pibe que escribe geniales y excitantes historias que estoy siguiendo hace un tiempito). Con mi chico nos hemos vuelto visitantes asiduos de algunos de ellos y hemos descubierto a excelentes escritores, amateurs quizá, pero con exquisitos textos, bien gráficos algunos pero sin llegar a lo porno-barato que se obtiene en internet o a lo desagradable. Historias anónimas de anónimos en la noche o el día, con situaciones o lugares inusuales, y otras bastante comunes pero sin dejar de ser ex-ci-tan-tes.

La lectura puede abrir muchas puertas a lugares desconocidos en nuestras mentes, podemos viajar y descubrir. Quién dijo que no podemos también excitarnos?? Me pregunto ahora si estos ratones tienen alguna relación con los otros ratones... esos de biblioteca ;P