domingo a la mañana

Domingo a la mañana. Mientras miro la inmensa profundidad negra en la taza de café pienso cosas. Te cuento qué soñé y escucho lo que soñaste. Sigo pensando, mi cabeza siempre da mil vueltas a todo, en especial en una mañana de domingo. Pienso cosas que van más allá de la cocina, de nuestra casa, y de nuestras vidas. Te dije muchas veces cómo me gustaría no pensar tanto, tantas cosas, vivir en alguna especie de burbuja donde la inocencia y el desinterés me sostengan. Ver sólo lo que quiero ver. No sé si sea egoista, pero podría descansar un rato mi cabeza. Nunca paro de pensar, de sentir. Y lo externo a mi corazón, a mi burbuja que intento crear, allá afuera nada me es ajeno. No puedo evitarlo. Pienso qué nos ocurre a todos. No estamos bien. El otro día escucho en la radio cómo un conductor se baja de su auto para moler a palos a otro conductor por un choque entre autos. No tiene sentido, verdad? Al instante recuerdo otras cosas que me quedaron dando infinitas vueltas en la cabeza. Pasa que no las entiendo. Una persona le pegó un puñetazo en la cara a otra porque ésta le pidió que por favor le cediera el asiento en el colectivo a otra persona, una persona mayor. La persona que estaba sentada se ofenfe y golpea a esta otra persona cuando en realidad sin que nadie se lo pidiese debería haber nacido de él mismo la voluntad de ofrecer ese asiento. No tiene sentido, verdad? También escuché que un perro atropellado fue salvado de la calle luego de estar tirado dos días completos agonizando mientras la gente pasaba a su lado. Nadie, realmente nadie lo vio? No tiene sentido. No lo tiene, verdad? La gente sigue gritando, la gente sigue pidiendo cosas, la gente sigue infeliz, nadie está conforme, pero no entiendo muy bien lo que ocurre. No tiene sentido, no lo encuentro. De repente, vuelvo a la taza de café y el ruido de un mordizco tuyo a la galleta me despierta y me saca de mis pensamientos. Huelo el café y sigo preguntandome cosas. Pasa que no las entiendo.

3 comentarios:

Darío dijo...

La gente está nerviosa, caliente, desbordada. Si les preguntás porque, todo se refieren al merophecho de "tener", tener mucho más, aún en detrimento de los que no tienen nada.
Y por eso hacen ruido. Golpean cacerola y gritan y putean-. Sólo para tener, tener más. Nop importqa a costa de q

Darío dijo...

No sé cómo acabé el comentario, porque apreté una tecla y se fue de repente...

Shang Yue dijo...

y si te concentras en el aroma de ese café de domingo?
en el mordisco de la galleta
en su sonrisa que te mira más allá de las legañas aún por limpiar
en el silencio opaco de la cocina a esa hora


eso es lo único importante una mañana de domingo